Baltazar Maza, el joven de 25 años que se encuentra prófugo desde hace dos semanas luego de matar a su expareja, es por estos días uno de los hombres más buscados de la provincia. Luego del homicidio de Natalia Velardez, ultimada en Pichanal el seis de enero a la tarde, la familia de la víctima inició una persecución para dar con Maza y hacer justicia por mano propia.
El prófugo parece contar con el apoyo de su clan familiar, sobre el que recaen sospechas de actividades delictivas. Ante ésta posibilidad, que podría devenir en un tiroteo de consecuencias impredecibles, la policía también se encuentra tras sus pasos. Una comisión rastrilla el monte chaqueño, donde se cree que está escondido Maza. Cubren una zona que va desde la ruta nacional 81, al norte de Embarcación, e incluye los límites con Bolivia e incluso Paraguay.
En una carrera contrarreloj, que hasta ayer incluía 50 hombres a los que hoy se sumarán otros 20, además de la división Canes, la fuerza estima encontrarlo antes que los familiares de Velardez, quienes conocen la zona como la palma de su mano, al igual que el prófugo.
Durante estos catorce días ya fueron rastrillados los puestos Las Catas, Tres de Mayo, Puesto del Medio, El Escondido hasta llegar a la zona de El Desemboque, Santa Victoria Este y Misión La Paz, en el límite con el Paraguay; sin resultados.
Un sujeto violento
Baltazar Maza tiene un importante prontuario por amenazas y robo calificado, al que se suma el homicidio de la jovencita con quien tuvo un hijo hace dos años.
El seis de enero pasado a las 21, durante su cumpleaños, el joven llegó a la casa de la madrina de Natalia con la intención de ver al niño, hablar y reanudar la relación. La joven madre en cambio estaba dispuesta a concluir con un vínculo tortuoso de tres años, que incluyó varias denuncias por violencia familiar en las comisarías de Hickman y Dragones.
Ella se negó, pero él insistió y Natalia finalmente salió, aunque lo hizo sola. El hombre quiso que volvieran a Dragones, pero la negativa de Natalia violentó a Maza. La joven se dio media vuelta para entrar a la casa, pero Baltazar la tomó de los pelos evitando que avanzara, la hizo girar y le disparó en el pecho con el arma que había llevado escondida entre sus ropas. Natalia cayó herida de muerte y su expareja la remató con otro tiro en el cuello. Según se supo luego, el agresor había llevado solo dos balas, una para la joven y otra para su hijo. Se sospecha que en el monte, el fugitivo recibe ayuda de sus familiares, muchos de ellos,con antecedentes delictivos. Se trataría de una especie de clan de perfil delictivo y con vasto conocimiento de la zona. Oficialmente, se dedican a tareas rurales. Según trascendidos, los parientes del fugitivo recorrerían el monte en motos enduro, y no a caballo como los lugareños; además usarían celulares de última generación.
Tres días después de fugarse, Maza intentó robar un caballo en un puesto de Dragones, pero fue rodeado por policías de Morillo y se produjo una balacera. El caballo resultó herido y el logró escapar. Ahora contaría con recursos más modernos.
