Una beba de tan sólo dos años fue atacada por una jauría de perros en un asentamiento de la ciudad de Embarcación, en circunstancias en que sus jóvenes padres la habían dejado dormida y se habían retirado hasta una casa vecina para celebrar el Día del Trabajo.
El desafortunado suceso ocurrió cerca de las 23.10, cuando la beba, identificada como Anahí González, despertó y salió de su humilde vivienda en busca de sus padres, trasponiendo una precaria divisoria con un lote vecino, donde se hallaban al menos cinco perros criollos que atacaron a la beba hasta quitarle la vida.
La intervención de la propietaria de los canes evitó que estos devoraran a la pequeña, pero no pudo evitar la tragedia final.
Minutos después tomaron conocimiento sus padres, Eduardo González (19) y Gisela Villa (19), quienes finalmente la llevaron hasta el hospital de la zonal de Embarcación.
La niñita estaba ya sin vida y su muerte al parecer habría ocurrido al menos una hora antes de que ingresara al nosocomio.
La pequeña Anahí presentaba lesiones gravísimas a la altura del cuello y la cabeza, y las piernas estaban prácticamente destrozadas por la acción de las fauces de los perros del vecino.
De acuerdo con las primeras averiguaciones, el hecho se registró poco antes de las 23.30, en circunstancias en que los progenitores dejaron a la pequeña sola en el inmueble, para ir a visitar a familiares, a pocos metros del lugar de la tragedia.
En un momento dado la pequeña despertó y, al parecer, salió del inmueble y se acercó a la casa colindante, donde fue ferozmente atacada por cinco canes de propiedad del dueño de la casa vecina, un jornalero dedicado a trabajos de albañilería.
De inmediato la noticia enlutó los festejos que se habían preparado en el asentamiento San Juan.
Estupor e indignación fueron el marco del velatorio realizado ayer, donde una multitud se congregó a curiosear y a solicitar precisiones acerca del fatal ataque de los perros sobre la pequeña.
La Policía puso en conocimiento al magistrado de turno, quien ordenó que se le realice la autopsia a la menor. La misma fue efectuada ayer por el médico legal, en horas de la madrugada, diagnosticando como causas de la muerte de la pequeña Anahí un paro cardiorrespiratorio por
heridas en las arterias femoral y las graves lesiones recibidas en la cabeza.
Informado el juez de turno, ordenó que se tomen declaraciones de los padres y testigos, se efectúen las pericias de rigor y se proceda a entregar el cuerpo a los padres.
Los animales se encuentran en la dependencia policial de Embarcación, a la espera de ser sometidos al examen veterinario correspondiente, conforme lo ordenado por la autoridad judicial y el fiscal correccional en turno.
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